NOTA TECNICA SOBRE BORRADO DE MARCAS VIALES
1. INTRODUCCIÓN
Uno de los más importantes
requisitos de las marcas viales es, sin duda, su durabilidad. Los fabricantes de pinturas
se esfuerzan por mejorarla, produciendo materiales cada vez más resistentes a los agentes
que tienden a degradar la marca, e investigando nuevas técnicas de aplicación.
Hay una contradicción
entre la exigencia de durabilidad de la marca vial, y la facilidad de su eliminación o
borrado en caso de cambios imprevistos o errores en su aplicación.
De lo anterior se puede
sacar una primera conclusión: ya que el borrado de una marca vial es una operación
complicada y problemática, se debe estudiar con todo cuidado la ordenación de la
circulación, tanto durante la ejecución de una obra como en su posterior explotación
(hasta que se lleve a cabo una operación de renovación superficial del pavimento o
refuerzo), de forma que se conozcan de antemano las marcas que hayan de ser borradas, para
las cuales se deben emplear materiales de corta duración o temporales que puedan ser
borrados con facilidad sin perjuicio del pavimento.
2. SITUACIÓN ACTUAL
Se viene observando una
cierta falta de previsión de la necesidad de borrar marcas viales, así como un sistema
de borrado poco recomendable, consistente en pintar sobre las marcas con pinturas o
lechadas asfálticas, con una pigmentación lo más parecida posible al pavimento. El
resultado inicial es tolerable, pero se necesita un esfuerzo de conservación continuo, ya
que esos productos preservan la marca no deseada del desgaste por el tráfico y otras
agentes de degradación, conservándola intacta, con lo que termina por reaparecer y
(además del deterioro de la imagen de la carretera) convertirse en un factor de
accidentalidad. Por otra parte, al generalizarse esta práctica inadecuada, se ha
dificultado la aparición de otros sistemas mejores de borrado y la adquisición de
maquinaria especializada, por falta de demanda.
3. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Se recomienda en primer
lugar una correcta previsión de los tramos de marcaje provisional, es decir: conocer las
marcas que hayan de ser borradas, utilizando marcas temporales que puedan ser eliminadas
con facilidad:
- Las cintas adhesivas que, además de proporcionar una gran calidad, pueden ser
despegadas del pavimento al terminar su misión sin dejar huella. Están muy indicadas en
desvíos provisionales, pudiendo ser reforzada su visibilidad nocturna con captafaros que
proporciones retrorreflexión bajo lluvia.
- Para los casos -menos frecuentes- en que la longitud de la marca a eliminar sea
considerable, con la consiguiente repercusión económica, se pueden emplear pinturas
temporales. En este caso se debe prestar mucha atención a las recomendaciones del
fabricante en los referente a su aplicación y procedimiento de eliminación.
En los casos en que haya
que eliminar marcas definitivas, se pueden emplear los siguientes sistemas de borrado:
- Pintar sobre la marca. Este procedimiento no es recomendable; no obstante, en casos
apremiantes, o en pavimentos muy deteriorados próximos a ser renovados o reforzados, se
puede justificar su empleo. En este caso hay que emplear productos mates, para eliminar la
reflexión especular durante el día, y sobre todo vigilar y conservar el buen estado del
borrado.
- Proyección de abrasivos granulares. Este procedimiento parece el más recomendable en
todo tipo de pavimentos, can marcas que no sean de larga duración (termoplástico y dos
componentes) . Su eficacia es buena, ya que elimina incluso la parte de material que se
halla en las cavidades del pavimento, y es poco destructivo. Existen máquinas que emplean
el abrasivo en circuito cerrado, eliminando riesgos al tráfico y al entorno.
- Herramientas, como fresas o discos dentados. Se puede emplear en todo tipo de pavimento
y marca. Es más destructivo que el anterior, pero en la mayoría de los casos más barato
y rápido. En la actualidad existen máquinas que, manejadas con habilidad, producen
escasos daños en el pavimento.
- Quemador de gas. Es muy económico, pero también muy destructivo; sólo se recomienda
en el difícil caso del borrado de marcas de alta duración (termoplástico y das
componentes) . Es aconsejable regar primero con agua, esperar un tiempo hasta su
desaparición y después emplear el soplete, ayudándose con una espátula para eliminar
la marca.
Los demás
procedimientos se deben considerar menos recomendables.
Madrid, 5 de febrero de
1991
El Subdirector General
de Tecnología y Proyectos,
Fdo. Sandro Rocci Boccaleri